PRUEBA 1: Al probarte el casco fíjate si te entra con facilidad o por el contrario te cuesta un poco y arrastra el rostro hacía abajo quiere decir que vas por buen camino, pero fíjate en la presión que ejerce el casco en tu frente, si es muy acusada y provoca un poco de dolor es que te está pequeño.
PRUEBA 2: Otra prueba es meter dos dedos (índice y corazón) por la frente y por la nuca, si entran con facilidad es que llevas una talla mas de la que te toca, prueba con otra mas pequeña.
PRUEBA 3: Ladea la cabeza con el casco puesto de un lado a otro (como si dijeras que no) lo más rápido posible. Si sientes un pequeño movimiento del casco, es decir, si sientes que se ladea, es que llevas una talla superior a la que te corresponde.
Hay que mencionar que cuanta mas calidad tiene un casco mejor se ajusta ya que los interiores están mejor calibrados con la talla de referencia y suelen tener diferentes tamaños de calota para los distintos tallajes de la tabla.
Comments (0)